Placemaking Latinoamérica, Valparaíaso Noviembre 2017
Es duro admitirlo pero no consigo dedicarle todo el tiempo que me gustaría a escribir en este blog. Ni siquiera consigo mantener al día la información sobre mis movimientos y actividades.
Pero bueno….
En este caso si que os cuento con suficiente antelación que a principio de noviembre de este 2017 estaré en Valparaíso para participar del evento Placemaking Latinoamérica, un encuentro que trata sobre Innovación Urbana Ciudadana, y que se realiza cada año en distintas partes del mundo. Los Placemaking Leadership Forums comenzaron en Detroit en 2013. El año pasado tuvo lugar en Vancouver, este año se realiza en Amsterdam, Nairobi y además, por primera vez será en una ciudad latinoamericana, Valparaíso con el lema “La Reconquista del Espacio Público.”
Organizado en Chile por la ONG Espacio Lúdico y patrocinado por la Organización Project for Public Spaces, Fundación Avina y la comunidad CivicWise.
Más adelante os contaré de que forma participa CivicWise.
Aprovecho para públicar una entrevista que me han hecho los organizadores para promover el evento.
¿Qué es el Placemaking para ti?
Me gusta entender el Placemaking como el conjunto de acciones, dinámicas y estrategias que consiguen que una comunidad local sea capaz de trabajar de forma colaborativa para mejorar un espacio común o espacio público. Un elemento importante es la capacidad de hacerlo de forma directa, sin la necesidad de grandes presupuestos y sobretodo sin la necesidad de una proceso que se alargue mucho en el tiempo. Es importante conseguir resultados colectivos y visibles en un tiempo reducido. Desde una visión más amplia, el Placemaking no debería ser nunca el objetivo final, sino un punto de partida que sirva para fortalecer (a veces incluso generar) una comunidad local que gracias a procesos de Inteligencia Colectiva siga siendo protagonista y con capacidad de gnerar impacto positivo en el territorio. Para ello es esencial que estos tipo de procesos se entiendan como la oportunidad para mejorar la colaboración entre los diferentes sectores como son la administración pública, la ciudadanía, el sector privado y la universidad.
Pensando en América Latina, o en Chile específicamente ¿cómo crees que el Placemaking se desarrolla o se podría desarrollar en América Latina? ¿Qué factor o dimensión sería distintiva?
Creo que un elemento a tener en cuenta es la posibilidad y la capacidad de activar procesos que no dependan de una reglamentación demasiado rígida. Esto puede ser una ventaja para que las intervenciones gocen de la libertad necesaria para que los resultados acaben realmente siendo una semilla y la comunidad implicada se sienta realmente protagonista. Existe sin embargo el peligro de que se genere una mala práctica o percepción que pueda confundir o asociar el Placemaking con intervenciones baratas que sirvan para poner “parches” a problemas más complejos a los que no sabemos o no queremos enfrentarnos.
La clave está en trabajar el modelo de colaboración entre la administración pública y la ciudadanía, aprovechando la facilitación de buenos profesionales
Creo que justo en esta dinámicas América Latina puede aportar una visión mucho más interesante e innovadora.
¿Por qué crees que la participación ciudadana es elemental para construir ciudades o nuevos espacios públicos? ¿Podrías ejemplificar con algún caso en especial?
Es evidente que el modelo de sociedad basado en el conocimiento especializado, la segmentación y la delega ha fracasado. Hace muchos años Jan Gehl ya insistía en la necesidad de hacer ciudad para las personas. Hoy es urgente ir más lejos. Necesitamos hacer ciudad CON las personas. Pasar del PARA al CON es determinante. De esta forma cambiamos la visión del territorio. El conocimiento especializado sigue teniendo un valor esencial, sin embargo no puede disociarse del conocimiento situado, es decir de la experiencia de todos los que ya viven un determinado territorio. Los planteamientos teóricos, generados en oficinas, sin ningún tipo de conexión con la realidad social y humana de los territorios, han generado y siguen generando intervenciones problemáticas.
La participación ciudadana es esencial para recolocarnos al centro de los territorios que habitamos y dejar de pensar que solo algunos están legitimados para decidir y actuar sobre el.
Necesitamos urgentemente volver a trabajar DESDE el territorio y no simplemente EN el territorio. De esta forma, todos, expertos, académicos, políticos, empresas y ciudadanos colaboramos desde el mismo punto de partida: el territorio. Cada uno con su conocimiento y experiencia. Muy simplemente se trata de volver a considerar el territorio como la construcción de todos, porque solo de esta forma somos capaces de mejorar la calidad de vida y la justicia social.
Un ejemplo a seguir es la iniciativa Acciones de Paz que está promoviendo el gobierno de Nariño en Colombia para que todos se puedan apropiar del momento histórico que vive todo el País, con la terminación del conflicto y la firma de los acuerdos entre el Gobierno y las FARC. Con esta iniciativa, el gobierno de esta región colombiana, está promoviendo la auto-organización ciudadana y procesos de construcción colectiva enfocados a la recuperación de espacios públicos. El trasfondo hace que este proceso sea todavía más interesante, puesto que los espacio públicos recuperados serán el escenario de acciones que permitirán vivir en primera persona el proceso de construcción de la paz. Es la oportunidad para que las habilidades, las potencialidades, las opiniones, y los deseos de la comunidad, con el apoyo de la administración, propicien entre todos un cambio no solo en el entorno físico, sino también de comportamiento de las personas.
Toda la dinámica se desarrolla en tres fases. Ha empezado con un mapeo de los espacios públicos que se encuentran sub-utilizados o en desuso, luego se ha pasado a diseñar y construir unos mobiliarios sociales en los espacios seleccionados por la comunidad y por último se promoverán en estos espacios, diálogos abiertos entre los ciudadanos, crear procomunes, sueños compartidos, pequeñas acciones que permitan vivir la paz.
Las intervenciones se han desarrollado con la participación directa de las comunidades locales. Especialmente llamativo es también el enfoque abierto de esta iniciativa que está incluso generando documentos con licencias abiertas para que los muebles diseñados y construidos durante todo el proceso puedan ser replicado y construidos en cualquier otro lugar del mundo.
¿Qué te parece que este tipo de eventos se haga por primera vez en América Latina y, en especial, en Valparaíso como lugar estratégico?
Valparaíso es una de las ciudades de América Latina que más me ha impactado.
Su vitalidad es única. Desde el primer momento que he pisado sus calles, he percibido una energía muy positiva; una especie de vibración llena de oportunidades. Me parece una ciudad, que comparada con otras del mismo tamaño y condiciones sociales y económicas parecidas, ofrece más claramente a cualquier persona que se mueva con actitud colaborativa y solidaria, la oportunidad de generar un impacto positivo. Así que me parece no solamente simbólico sino una tremenda oportunidad el hecho de que este evento tenga lugar en Valparaíso.
Vivimos en la era de Internet. El conocimiento global está al alcance de casi todos. Cada territorio puede aprender de los otros y al mismo tiempo tiene algo que enseñar, independientemente de su condición social, económica y política.
Me parece necesario que América Latina tenga más presencia en la reflexión global sobre el desarrollo de los territorios aportando una visión nueva desde una perspectiva diferente.
Para que podamos realmente aprovechar el conocimiento y las experiencias desarrolladas en los diferentes territorios, no es suficiente simplemente intercambiar información, es esencial establecer una relación de intercambio y colaboración que tenga siempre en cuenta dos factores: lo Situado y lo Conectado.
Con Situado quiero insistir en la diversidad específica de cada territorio y su capacidad de desarrollar nuevas soluciones. Si bien sabemos que no sirve de nada re-inventar la rueda, tampoco nos podemos limitar a replicar prácticas que han funcionado en territorios muy diferentes: es esencial que cada territorio se sienta suficientemente fuerte para generar su identidad y su ecosistema local, con sus propias soluciones.
Con Conectado quiero insistir en la necesidad de que cualquier experiencia local quede conectada con las diferentes realidades y territorios sean ellos cercanos o lejanos. Esta conexión puede ayudar a no repetir errores que otros territorios ya han experimentado, pero también puede ser el punto de partida para generar soluciones que solo son posible gracias a la sinergia entre diferentes actores y dinámicas que operan en territorios diferentes o incluso entre escalas diferentes como son la local y la global.
La globalización es una condición que influencia, define y condiciona hoy en día casi cualquier territorio. Teniendo en cuenta los enfoques “situado” y “conectado” recuperamos la capacidad de intervenir en nuestros territorios desde una perspectiva nueva que permite que dinámicas locales puedan beneficiarse de aquellas de carácter más global. En definitiva volvemos a la enorme importancia de intervenir en los territorios teniendo siempre presente su propia dimensión glocal.
¿Qué nos puedes adelantar sobre tu presentación y visita para este noviembre?
Me hace doblemente ilusión poder participar de este evento, sea por la oportunidad de ser uno de los protagonistas, sea por la posibilidad de fortalecer el lazo de colaboración de la red CivicWise con las propuestas y las personas que protagonizarán el evento.
Durante mi presentación hablaré por supuesto de CivicWise de Diseño e Innovación Cïvica con ejemplos desde Europa y América Latina. Aportaré algunos conceptos clave que nos ayudan a enfocar mejor la Participación Ciudadana y las dinámicas de Inteligencia Colectiva. Hablaremos de Adhocracia, Multipertenencia, Extitución.
¿Cuáles son tus expectativas o proyecciones con respecto a este tipo de eventos?
Como comentaba más arriba, hoy Internet nos permite intercambiar conocimiento y estar conectados con personas de cualquier parte del mundo, sin embargo es innegable que necesitamos encontrarnos en persona. La energía, los aprendizaje y por supuesto la empatía que se genera con los encuentros presenciales es única y extraordinaria. Necesitamos tener estos momentos de encuentro. Somos cuerpos y necesitamos que nuestra relación con el conocimiento y cualquier acción que pueda tener un impacto positivo, pase por la relación y colaboración con otras personas, es decir otros cuerpos. Es por ello que este tipo de eventos son siempre muy interesantes. Una ocasión única para conocer e intercambiar con personas con inquietud y talento.
En este caso se suma una expectativa más que consiste en la posibilidad de que este encuentro consiga catalizar una red Latinoamericana de CivicWise y más en general conectar toda una serie de personas, organizaciones y entidades que puedan empezar a colaborar para promover un nuevo urbanismo con matriz propia desde América Latina y que tenga como punto de partida las personas y su capacidad de protagonizar la vida de cualquier territorio.